Newark, N.J. — Las calles de varios municipios del condado de Essex se llenaron
de color, humor y mensajes políticos durante las protestas “No Kings”
celebradas el pasado fin de semana, en las que cientos de manifestantes
utilizaron disfraces llamativos para expresar su rechazo al expresidente Donald
Trump.
Los manifestantes se unieron a las más de siete millones
de personas que participaron en marchas similares en todo Estados Unidos para
denunciar las políticas del exmandatario en temas como inmigración, libertad de
expresión, educación y salud. En respuesta, Trump aseguró ante los medios que
él “no es un rey”.
En localidades como Bloomfield, Caldwell, Glen Ridge,
Maplewood, Montclair y Newark, los manifestantes se destacaron por su
creatividad. En Caldwell, un participante caminó por la acera disfrazado de
“Tyrannosaurus Wrecks”; en Bloomfield, un unicornio multicolor levantaba un
cartel con la frase: “Sin tronos ni coronas, solo brillo y libertad”.
Otro manifestante lució un disfraz del personaje
Stay-Puft Marshmallow Man, de la película Ghostbusters, ondeando la bandera
estadounidense y mostrando un cartel que decía: “Soy un estadounidense sin
paga, defensor de la Constitución y ejerciendo mi derecho de la Primera
Enmienda. ¿Qué puede ser más patriótico que eso?”.
En Maplewood, un hombre vestido de gallo gigante agitaba
la bandera cerca del quiosco del pueblo, mientras que dos personas disfrazadas
de jirafas portaban un cartel que decía: “Jirafas contra los reyes”.
Las protestas con disfraces formaron parte de una tendencia
nacional en los eventos “No Kings”, donde participantes de todo el país se
presentaron con atuendos de tráfico inflables, ranas, piñatas y otros
personajes cómicos. Según algunos analistas, el uso del humor y los trajes
extravagantes busca contrarrestar la narrativa de que los opositores a Trump
son violentos.
En meses recientes, el expresidente había emitido órdenes
ejecutivas contra quienes quemaran la bandera estadounidense y declaró a Antifa
como una “organización terrorista doméstica”, lo que intensificó la tensión con
grupos de protesta. En respuesta, en ciudades como Portland y Washington D.C.,
los manifestantes optaron por el sarcasmo: desde ranas y águilas calvas hasta
extraterrestres y personajes de caricaturas como Bob Esponja.
A pesar de las críticas de algunos líderes republicanos,
entre ellos el presidente de la Cámara, Mike Johnson, las autoridades
confirmaron que las manifestaciones fueron pacíficas y no se registraron
arrestos relacionados con los eventos.
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